La schola Cantorum de Zamora junto al Cristo de la Humildad. |
La Hermandad Franciscana del
Santísimo Cristo de la Humildad, había invitado dentro de las actividades programadas
para este trimestre, a la Schola Cantorum de Zamora, que dirige don Vicente
Urones Sánchez, gran estudioso que desde la experiencia que han ido fraguando
los años, con el respaldo de una formación académica consolidada, ha hecho posible
que este grupo homogéneo resalte por la calidad de sus voces.
El recital no podía haber buscado mejor fecha
que la que rondaba a la festividad del Santo de Asís. Por esta razón ha sido el
día posterior a la fiesta franciscana, el elegido para que la Schola Cantorum
interpretase las Primeras Vísperas del
Oficio Rítmico de San Francisco de Asís. Este Oficio fue compuesto por el alemán Julian von Speyer, en París,
entre 1228 y 1230. En el año 1926, coincidiendo con el séptimo centenario del
fallecimiento de San Francisco, fray Eleseus Bruning publicó una revisión
crítica de esta obra
El Cristo de la Humildad como
gran vigía de la Iglesia de San Martín, fue espectador silente del recital. La
Schola Cantorum, durante una hora, hizo posible que el numeroso público
asistente, pudiese percibir ese estado de reflexión que abre sentimientos en lo
más profundo del alma, cuando el canto profundo reivindica el lugar que le
pertenece en los espacios del cristianismo de este tiempo y de todos los
tiempos.
Un recital para guardar en los
archivos del recuerdo y reabrirlo en otras coordenadas de los tiempos que
vengan, cuando rebusquemos dentro de nosotros, el néctar de lo que hemos
vivido.
Parte de los componentes de este
impresionante grupo coral, participaron este año en la marcha penitencial del
Cristo de la Humildad por las calles de Salamanca, causando entre los espectadores
una magnífica impresión. Aquellas voces auscultaban aún en el dolor penitente, senderos
de esperanza sobre el corazón de la noche salmanticense…
Desde la Hermandad Franciscana,
su Junta Directiva, en nombre y representación de todos los hermanos, agradece de
forma pública este gesto altruista de la Schola Cantorum de Zamora, con el que
tanto hemos gozado, esperando que los lazos amistosos puedan fraguar en el
futuro, una relación que una el canto gregoriano al espíritu franciscano de
nuestra Hermandad.