
Entre los asistentes estuvo fray Enrique Bermejo, mentor en
la hermandad en Jerusalén y acompañante del padre Patton, custodio de Tierra
Santa, cuando este se desplazó a Salamanca el pasado 6 de diciembre para
bendecir la imagen del Santísimo Cristo de la Humildad. En el transcurso de la
comida se le hizo entrega del diploma que le acredita como el primero de los
hermanos honorarios y de la cruz pectoral que como tal le incorpora a la
hermandad.
Terminada la comida, y tras un tiempo de amistosa
distensión, la visita a La Fuente de San Esteban concluyó en la iglesia
parroquial. Allí se pudo contemplar en el bajo coro el original y vanguardista
retablo realizado donado por Fernando Segovia y clausurar la jornada con una
sencilla oración en la que se pidió por los cristianos de Tierra Santa.